La NASA quiere sumergir un submarino autónomo en uno de los mares de hidrocarburos de Titán. La luna de Saturno es el único lugar en nuestro sistema solar donde hemos encontrado líquidos en la superficie, y recientemente se ha encontrado un tipo de molécula necesaria para la vida, lo que lo convierte en una de las prioridades de la exploración espacial.
Para hacerlo, la NASA está considerando la propuesta de un vehículo que sea capaz de realizar investigaciones científicas detalladas de forma autónoma bajo la superficie del Mar del Kraken, el cual fue descubierto por la misión Cassini en 2008, y que es el mayor cuerpo líquido de los numerosos lagos presentes la región del polo norte de Titán.
En el pasado ya se han propuesto otros conceptos para explorar océanos extraterrestres, aunque estos se limitaban a sondas suspendidas en vez de a vehículos autónomos como ahora se está considerando. Además, el desarrollo de este submarino tendría una doble ventaja, ya que además de proporcionar conocimientos sin precedentes de un mar extraterrestre, también ayudaría a la NASA a ampliar sus capacidades de exploración planetaria al incluir operaciones náuticas.
Pero no hay que olvidarse de que de momento sólo se trata de una propuesta para desarrollar un diseño conceptual del submarino. Esto quiere decir que todavía quedan varios pasos que dar antes de que se convierta en realidad, aunque la agencia espacial ya ha trazado un diseño de misión conceptual, y está considerando llevarla a cabo en los próximos 20 años.
Primero habrá que ser capaces de llegar hasta allí
En este vídeo vemos un ejemplo de lo que tiene en mente la NASA. Vemos cómo podría ser el aspecto del submarino, y cómo se sumergiría y utilizaría sus sensores para analizar las profundidades del Mar del Kraken. Todos estos datos serían enviados de vuelta a la tierra, donde los científicos de la NASA se encargarían de analizarlos.
Pero para poder sumergir este submarino en Titán, primero tendremos que ser capaces de llevarlo hasta allí. Nos separa una distancia de 1.400 millones de kilómetros de la luna de Saturno, por lo que primero haría falta construir una nave espacial capaz de realizar ese viaje.
Mientras se consigue, la comunidad científica ya está trabajando en preparar el terreno. La Universidad de Washington, por ejemplo, ha estado ayudando a la NASA a simular las condiciones a las que se expondría el vehículo al llegar a Titán. Además, este mes han anunciado la construcción de una cámara de prueba para albergar una mezcla líquida a temperaturas a 184 grados bajo cero para simular el mar Kraken.
Este también es un paso vital, ya que no podemos enviar a Titán un dispositivo cuya fabricación cueste miles de millones de dólares si no estamos seguros de que puede sobrevivir. Para eso, en esta cámara podrán irse probando los diferentes conceptos del submarino según se vayan desarrollando.
El grupo de investigación de la Universidad de Washington que está colaborando también se encuentra buscando soluciones para algunos de los problemas que previsiblemente se encontrará el submarino, como la molesta cantidad de burbujas que formaría una máquina caliente en un líquido tan frío, o las temperaturas de congelación de esos lagos para evitar imprevistos.
Fuente: xataka.com
No hay comentarios.:
Publicar un comentario